Los Cuidados Paliativos han dejado de ser un nicho para convertirse en una competencia fundamental. En torno al 80% de las personas que fallecen en España lo hacen a causa de una enfermedad, pero solo el 40% recibe cuidados paliativos. Una brecha que se está reduciendo poco a poco y por la que instituciones sanitarias y sociales buscan activamente profesionales con habilidades interdisciplinares y conocimientos específicos en el abordaje integral del final de la vida. Por ello, realizar el Diploma de Experto Interdisciplinar en Cuidados Paliativos y Atención al Final de la Vida del Instituto Cudeca y la Universidad de Málaga (UMA), no es una titulación más: es la clave para desbloquear tu empleabilidad en un sector en auge.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Estrategia Nacional de Cuidados Paliativos de España tienen como objetivo final la universalización de la atención paliativa. Esta realidad genera una necesidad constante de profesionales cualificados en hospices, Unidades de Cuidados Paliativos, equipos de soporte domiciliario, hospitales de agudos, residencias y centros sociosanitarios.
El Diploma de Experto ofrece una ventaja competitiva esencial: la adquisición de competencias exclusivas adaptadas a la complejidad del paciente y su entorno familiar, con un enfoque interdisciplinar que es el pilar de la excelencia paliativa y que han convertido a Cudeca en un referente en este campo.
Itinerarios Formativos exclusivos para cada profesional
El Experto está diseñado con un modelo modular que respeta y potencia las funciones de cada rama, garantizando que adquieras las herramientas prácticas y teóricas necesarias para destacar en tu campo sin perder de vista el encaje en una plan integral de Cuidados Paliativos. El Diploma de Experto está orientado para dotar al alumnado de las competencias interdisciplinares más demandadas en cada caso.
Para médicos y enfermeras, la formación especializada se traduce en una capacidad superior para manejar situaciones clínicas complejas, lo que es altamente valorado en cualquier equipo de Cuidados Paliativos.
Medicina: Conviértete en un experto en la valoración pronóstica, la toma de decisiones complejas y el control avanzado de síntomas.
Enfermería: Desarrollo de la pericia en el manejo integral del paciente y la familia, el liderazgo en la coordinación de los cuidados continuos, el manejo de dispositivos complejos y la gestión de la cronicidad avanzada.
Por su parte, el rol del psicólogo paliativista es crucial para la atención biopsicosocial. El Diploma ofrece una capacitación única para abordar las dimensiones del sufrimiento que exceden lo físico.
Entre las competencias se cuentan: Dominio de las herramientas de evaluación del distrés psicológico y espiritual. Capacitación en la intervención en crisis, el duelo y el soporte emocional al equipo asistencial.
Por último, el trabajador social es el pilar para garantizar que el paciente y la familia cuenten con los recursos necesarios para vivir con dignidad. Esta es una de las áreas más olvidadas en la formación generalista, pero que es una de las claves de los posgrados de la UMA y Cudeca.
Entre las competencias se cuentan: Profundización en la valoración sociofamiliar y la identificación de factores de riesgo. Conocimiento exhaustivo de la red de recursos sociosanitarios, gestión de ayudas y mediación familiar.
